Trump rescinde las autorizaciones de seguridad de sus rivales políticos Harris y Clinton, entre otros
Por Kit Maher y Katherine Dautrich, CNN
El presidente Donald Trump, en un memorando emitido a última hora de este viernes, ordenó a las agencias federales que revoquen las autorizaciones de seguridad de más de una docena de sus percibidos adversarios político, incluida la exvicepresidenta Kamala Harris y la exsecretaria de Estado Hillary Clinton.
“He determinado que ya no conviene al interés nacional que las siguientes personas accedan a información clasificada”, declaró Trump en el memorando. “Por la presente, ordeno a todos los jefes de departamentos y agencias ejecutivas que tomen todas las medidas adicionales necesarias y conforme a la legislación vigente para revocar cualquier autorización de seguridad vigente que tengan las personas mencionadas y rescindir de inmediato su acceso a información clasificada”.
El memorando se aplica a reuniones informativas clasificadas y a cualquier acceso que las personas pudieran haber tenido a información clasificada en función de su permanencia anterior en el Congreso.
La medida supone el último caso en el que Trump retira autorizaciones de seguridad a rivales políticos, después de que el presidente dijera en febrero que revocaba “inmediatamente” la autorización de seguridad del expresidente Joe Biden y ponía fin a sus sesiones informativas diarias de inteligencia, y de que haya utilizado maniobras similares para tomar medidas enérgicas contra los principales bufetes de abogados.
El memorando de este viernes formalizó la revocación de la autorización de seguridad de Biden, junto con la de varios otros a los que la administración Trump ha dicho previamente que retiró las autorizaciones, y pasó a bloquear el acceso de la familia del expresidente a información clasificada, suponiendo que tuvieran alguna.
Además de a sus rivales demócratas en las elecciones de 2016 y 2024, Trump también revocó las autorizaciones de los dos republicanos del comité de la Cámara de Representantes que investigó su papel en la insurrección del 6 de enero de 2021, la exrepresentante de Wyoming Liz Cheney y el exrepresentante de Illinois Adam Kinzinger.
A principios de este mes, la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, dijo que, de acuerdo con una directiva de Trump, había revocado las autorizaciones de seguridad de varias de las personas nombradas en el memorando de este viernes, incluidos altos funcionarios de Biden, el exsecretario de Estado Antony Blinken y el exasesor de Seguridad Nacional Jake Sullivan, así como dos de los abogados que presentaron casos legales contra Trump: la fiscal general de Nueva York, Letitia James, y el fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg.
En otro memorando emitido a altas horas de la noche de este viernes, Trump revisó sus rencores pasados contra los abogados que se le han opuesto y prometió castigar a los abogados y bufetes de abogados revocando sus autorizaciones de seguridad y cancelando los contratos federales que tengan.
Ordenó a la secretaria de Justicia Pam Bondi que revisara la conducta de los abogados y bufetes que, según la administración, han presentado demandas frívolas contra la administración Trump o han intentado bloquear iniciativas de inmigración, lo que ha intensificado la represión del presidente contra la comunidad legal estadounidense.
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Clay Voytek y Evan Pérez, de CNN, contribuyeron a este informe.
