El milagro del vino en Nueva Jersey
NEW JERSEY - Aunque California sigue siendo el gigante del vino en Estados Unidos, Nueva Jersey se ha convertido en una región dinámica del noreste, combinando tradición agrícola, innovación y turismo sostenible.
Audrey Gambino, fundadora de Villa Milagro, nació en California. En 2001, movida por la nostalgia del campo, compró junto a su esposo un terreno en el condado de Warren. Lo que comenzó como un proyecto pequeño se transformó en un viñedo modelo llamado “Villa Milagro”, que significa “lugar de milagros”.
El nombre celebra la regeneración de la naturaleza y los milagros del trabajo agrícola. Cada año, más de 600 mil visitantes recorren los viñedos del estado. Según WineAmerica, la industria del vino en Nueva Jersey genera más de 5.6 mil millones de dólares y sostiene cerca de 30 mil empleos.
Pero, ¿cómo pasa la uva del campo a tu mesa? Rogelio Velasco Martínez, hoy copropietario de Villa Milagro, empezó como trabajador agrícola y quedó enamorado del proceso.
Trabajadores inmigrantes como Héctor, Hugo y Humberto viajan cada año desde México con visas H-2A. Ellos podan, protegen la uva con malla y cosechan con cuidado para evitar cortes y daños.
Desde hace 11 años, manos migrantes cosechan, embotellan y dan vida al vino, liderados por Rogelio, quien pasó de trabajador a socio del negocio. Su orgullo crece con cada cosecha y cada caja de vino producida.
Tras la cosecha, Audrey supervisa la fermentación y luego la cata para los visitantes. Ella destaca que nada sería posible sin sus trabajadores: un milagro silencioso que sostiene la industria año tras año.
En cada botella de Villa Milagro hay esfuerzo, gratitud y fe. Historias que, como el buen vino, maduran con el tiempo.
